NO al mal olor en el lavavajillas

Con el uso, el lavavajillas va adquiriendo olores desagradables que pueden entorpecer la limpieza de nuestra vajilla. Cuando, tras el lavado, abrimos el lavavajillas y no huele a detergente… mala señal. Algo en su interior está produciendo malos olores, así que tenemos que buscar las causas.

Lo más habitual es que, al no enjuagar los platos, en el fondo se hayan acumulado restos de comida. Pero esta no es la única causa, vamos a ver más:

  • Restos de comida en el fondo del lavavajillas. Solución: enjuaga los platos antes de meterlos al lavaplatos.
  • Filtro del lavavajillas sucio. Solución: limpia el filtro de forma regular.
  • Drenaje taponado. Solución: vigila que el agua sucia salga sin problemas y, en caso de atasco, desatascar el conducto.
  • Humedad y moho. Solución: deja la puerta abierta una vez que haya acabado el ciclo de limpieza.

En los supermercados y comercios podemos encontrar ambientador para el lavavajillas, que desprenden aroma en cada lavado. Sin embargo, podemos optar por otras opciones caseras que funcionarán igualmente.

Desde M. J. Suazo te queremos proponer estos trucos para acabar con el mal olor:

Cítricos

Añade pieles de limón, naranja, pomelo, lima o mandarina. Esto servirá para dar un mejor olor a cualquier ambiente. Además es conocido que la cáscara guarda sus mejores propiedades. Puedes meterlas en una bolsita o dejarlas en uno de los compartimentos de los cubiertos. Retira tras cada lavado.

Hay quien las cuece antes de colgarlas dentro del lavavajillas, aunque teniendo en cuenta la temperatura que alcanzará una vez esté dentro y funcionando, no parece necesario. Pero como todo, a gusto del consumidor.

Mal olor lavavajillas

Bicarbonato sódico

Antes de un lavado, espolvorea media taza de bicarbonato sódico en la parte inferior del lavavajillas. Después, ponlo a funcionar. Da igual que el aparato esté vacío o lleno. Neutralizará los olores y los vasos y platos de vidrio quedarán limpios gracias al bicarbonato de sodio, y también las ollas de metal y las sartenes.

Vinagre

El truco consiste en verter dentro del lavavajillas una taza de vinagre y poner un ciclo completo a máxima temperatura para abrillantar y limpiar. La sugerencia es hacerlo al menos una vez cada dos meses, pero todo depende de cada casa.

Por último, os recordamos que es importante limpiar con regularidad los filtros del lavavajillas, así como el interior que se va ensuciando con los lavados. Un buen mantenimiento y uso del lavavajillas nos ayudará a conservarlo durante más tiempo.

lavavajillas Suazo Chiclana